Yugi ha pasado por una situación muy fuerte que lo dejó en shock, causándole un conflicto interno entre él y Yami, (el espíritu de su artículo del milenio).
Justo después debe participar en un duelo con Mai Valentine y está completamente desconectado de la pelea. Ella está inconforme con esto porque quiere tener un duelo parejo en el que ambos den todo lo que tengan haciendo que sea un juego justo.
Así que ella toma la palabra y le dice a Yugi algo como:
“Tener las agallas de mirar dentro y enfrentar lo que ves, mirar los demonios propios y enfrentarlos, es una lección que todos deben aprender… Un duelista puede aprender más de sus derrotas que de sus victorias, enfrentando los temores y no manteniéndolos. Dime Yugi ¿Has enfrentado tus temores? ¿Lo que te causó miedo ya lo superaste?”
Esa pregunta lo impactó y también a mí, pues nuestros fracasos a veces nos paralizan, pero no debería ser así, las derrotas no nos etiquetan ni nos condenan a nunca volver a probar la victoria. Son solo situaciones que nos dan experiencia para afrontar mejor los retos porvenir.
Pensando en las palabras de Mai recordé una frase de Hemingway que decía "Un hombre de carácter podrá ser derrotado, pero jamás destruido" lo que me llevó hasta una cita bíblica que memoricé cuando era niña:
“…que estamos atribulados en todo, pero no angustiados; en apuros, pero no desesperados; perseguidos, pero no desamparados; derribados, pero no destruidos” (1 Corintios 4:8-9)
-Shino-