Algunas veces el Señor tiene que hablarnos como a Samuel: "...Pero Dios le dijo: «Samuel, no te fijes en su apariencia ni en su gran estatura. Éste no es mi elegido. Yo no me fijo en las apariencias; yo me fijo en el corazón»." ( *-*) (1 Samuel 16:7)
En la actualidad parece ser más importante la apariencia externa que un alma noble. Y eso es algo triste, pues la belleza se acaba, pero el carácter de una persona, sea noble o egoísta, no cambiará. Al final te quedarás junto a la esencia del alma y no con el estuche.
Se cuidadoso al elegir tu futuro y busca alguien con un corazón entregado al Señor, noble, sincero y real.
Recuerda que tu vida y la esencia de tu ser son únicas y especiales... No las dejes en manos de alguien descuidado o pasajero. Se paciente y mira más allá de lo que ven los ojos .
-Shino-
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