Hace tiempo un chico de unos 20 años me dijo que le gustaba alguien mucho mayor que él (15 años mayor), y yo le pregunté ¿Es permanente ese sentimiento o una atracción temporal? Y él dijo: No, a mí me gusta esta persona, la quiero y lo pasamos muy bien juntos cuando salimos. Entonces pregunté de nuevo: ¿Tú te ves en el futuro con ella, viéndola envejecer primero que tú? ¿Y si por alguna circunstancia esa persona perdiera su salud y quedara discapacitada o postrada en cama la seguirías queriendo? ¿Serías incondicional con ella, aunque ya no pudieran salir a ningún lugar con facilidad? Entonces él guardó silencio y se alejó, quizás pensando en todo lo que le dije. Desconozco qué decidió al final.
También viví un año con una pareja que se casaron jóvenes y vivieron felices muchos años, incluso tienen una hija en la universidad… Pero luego, por un procedimiento en la garganta del señor lesionaron algo en su espina dorsal y eso lo dejó postrado en cama y tampoco puede hablar debido a eso. Él ya no podía trabajar, pero ella no lo abandonó, al contrario, ha estado para él siempre, incluso contrató enfermeras que le ayudaran a mantenerlo saludable y ejercitado, aunque no pueda moverse, porque ella lo ama más allá de que las circunstancias hayan cambiado y de que ya no puedan hacer mil planes como antes.
Hoy me dijeron que mi prueba covid salió positiva y debo aislarme unos días. Se siente feo saberlo incluso si no hay síntomas, y también se siente la discriminación de quienes saben que eres positivo. Pero debo destacar que, aunque tengo una relación a distancia, mi novio me dijo que como en los votos, estaría pendiente de mí en la salud y en la enfermedad, y hablando del tema, me aseguró que en tanto tiempo de conocernos y a pesar de que no todos los días son felices al 100%, nunca pensaría en alejarse, incluso si yo padeciera alguna enfermedad grave o una discapacidad.
¡Saber eso ha sido más revitalizante que cualquier medicamento!
Sé que ha sido Dios quien puso en su corazón tanto amor para mí y me siento afortunada de ser como el segundo caso que te conté… Saber que Dios fue quien trazó el camino para conocernos y que cada vez estamos más seguros de querer construir un futuro en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza es lindo y asombroso.
Dios realmente ha concedido las peticiones de mi corazón.
-Shino-
